Este es nuestro proyecto realizado en la Villa Banús, ubicada en Marbella, con un total de 4017 metros cuadrados construidos con una historia muy particular: en la piscina de la villa hay un dibujo que el gran pintor Pablo Picasso le regaló a Antonio Ruíz Soler ‘’El Bailarín’’ por su actuación en su 80 cumpleaños.

Es una villa señorial, rodeada de un magnífico jardín en el que se puede disfrutar de unas vistas impresionantes del mar Mediterráneo.

KAOBE, como referente en diseño y construcción, hemos realizado este gran proyecto gracias a nuestra experiencia en el sector, dándole forma, color y vida a sus estancias, siempre adaptándonos a las necesidades del cliente y creando tranquilidad y equilibrio visual.
El sótano de la villa, la primera toma de contacto

En el sótano de esta vivienda en Marbella, donde se sitúa el garaje, la piscina interior, el gimnasio, el aseo de cortesía, el bar y la sala de cine, es el primer contacto con el interior de la villa, donde comienza la experiencia.

El pasillo es el camino que nos lleva al ocio y a las zonas donde disfrutar del tiempo libre. El uso del color blanco, negro y la decoración en las paredes mediante molduras y alistonados como en el hall, crea la conexión interior entre las diferentes habitaciones y una sensación de amplitud que desborda elegancia.

El garaje con suelo de granito galaxy, texturas de terciopelos, cuero, madera, y una cuidada iluminación que resalta detalles que emocionan y sorprenden. Una auténtica obra de sofisticación y elegancia.

Con la piscina interior se buscaba conseguir un espacio libre de estrés y que transmitiera serenidad y tranquilidad. La tarima de madera nos aporta calidez y contraste para añadir profundidad y equilibrio visual.

El bar es un espacio que transmite tanta serenidad como sofisticación. Cuando todas las piezas encajan, se crea una inexplicable sensación de equilibrio.

Un refugio en un mundo ajetreado: deja que la sala de cine te abrace. Una combinación de mobiliario, tonos atemporales… Imposible resistirse al encanto de este espacio. La sutileza y la pureza del blanco realza el diseño interior.

El gimnasio es un nuevo espacio a petición del cliente para completar la oferta wellness de la villa. Las máquinas de última generación y las celosías retroiluminadas nos evocan a la tradición andaluza e inundan el espacio de luz activando cuerpo y mente.

En el aseo de cortesía se realizó un restyling. Un espacio minimalista pero lleno de detalles que sorprenden a cualquiera que entre.
Planta baja, atmósferas únicas

En esta planta encontramos el hall, la cocina, el comedor, el salón, el aseo, el office, la zona de vinos y la terraza.

La total presencia del blanco y el negro del hall nos inunda los sentidos y hace de este espacio un lugar majestuoso.

La cocina es el corazón de la casa y cuando le sumamos diseño, funcionalidad y equipamiento como esta península chef, se convierte en el alma del hogar. El diseño y calidad de esta cocina traspasa la pantalla, sus encimeras de porcelánico modelo Calacatta, el suelo porcelánico imitación cemento de gran formato, los armarios lacados personalizados tanto interior como exteriormente y los tiradores dorados muestra una interpretación del lujo muy actual.

Cenar con estilo frente a unas elegantes paredes negras y una atractiva mesa de mármol como la del comedor crea una atmósfera única. Es fácil dejarse llevar por la continuidad y la homogeneidad de este espacio.

Para el salón se optó por paneles elegantes, un sofá tentador y una alfombra suave y elegante. Sabes que estás en la casa de tus sueños cuando cada detalle te refleja a ti, ¿no crees?

Cuando un espacio es tan importante como el office, hay que prestar atención a cada detalle: la inspiración, la motivación y el debate, que todo cobre vida en el marco adecuado. Los despachos monótonos son cosa del pasado. Un lugar de trabajo con una acogedora distribución, su diseño estratégico y su novedoso uso de tonos y elementos.

La zona del exterior desprende un ambiente relajado: el espacio perfecto para retirarse cuando la vida es demasiado caótica, ¿a quién no le apetecería? Las sutilezas de una estética refinada crean una sensación de grandeza y destacan aún más los excepcionales detalles de la arquitectura.

Subamos la elegancia a un nivel superior con este brillante juego de blanco y negro en el aseo. La interacción de ambos colores difumina los bordes, dando la impresión de un espacio inmenso. Mientras tanto, los pequeños toques de oro captarán su atención e imaginación.

Exponer su colección de vinos con estilo para que todos la aprecien como en esta vinoteca es tentador. Cuando un estante no sea suficiente, improvisar con una pared entera de vino es buena elección. Deja que sea la obra de arte la que ancle la habitación.

El uso del color y la luz son los materiales intangibles de la arquitectura de interiores y convierten un espacio en un ambiente único y personal.